El fin de semana festejamos un cumpleaños, y como la mayoría de los Facebookeros, publiqué fotos del pastel, bellamente adornado con flores de merengue, y donde se alcanzaba a ver el relleno de mermelada. Es decir, una verdadera bomba de calorías. Una de mis amistades preguntaba si eso era parte de los consejos que daba para el control de la cintura (peso).
Ello me da pie perfectamente para aclarar un punto, pero que en el asunto del control de peso y medidas (yo soy más fan de controlarte por las medidas que por el peso) este punto es el fiel de la balanza.
En un régimen bajo en calorías («dieta para bajar») ¿puedo comer pastel? La respuesta es un categórico SI, sí puedes, PERO, come para cumplir la parte social, e innegablemente para no morir del antojo. Lo que NO debes hacer es servirte una rebanada ENORME. Si quieres que el gusto te dure… come lentamente, disfrútalo al máximo y entiende que esta rebanada es la excepción, no la regla.
Si en la fiesta también hay otros bocadillos que disfrutar, adelante, pero que sean uno o dos, y siempre considerando que debes de comer para probar, para convivir, para quitarte el antojo.
Desafortunadamente, la mayoría de los «alimentos» que se ofrecen en una fiesta, no son alimentos nutritivos, son en general la herencia de tiempos en los que preparar un pastel era un lujo. Y podían pasar meses o incluso años antes de que se repitiera.
Como padre, también es importante que atiendas estos consejos, si creías que los consejos eran solo para tu #pandita, vuelve a leerlos e imagina que son para ti.
Recuerda que las palabras enseñan, pero el ejemplo arrastra. El cambio debe comenzar por uno mismo!
Como siempre, te recomendamos acudir a un especialista y compartir esta información.